10a etapa.
Salamanca -Zamora
Hemos salido temprano del Albergue juvenil
Lazarillo de Tormes. Ha estado bien pero las duchas muy pequeñas (tenias que
abrir la puerta de la ducha para poderte enjabonar las piernas).
Desayunamos en el centro de Salamanca y
empezamos el camino. Hacia frio.
Hoy ha sido una etapa agradable para las
piernas. Muy "plana", con una parte por carretera (que nos permitió
comernos kilometros de forma rápida) y el resto por un camino muy ciclable.
Lo mejor: los cambios del paisaje y las
inmensas superficies de cultivo. Se nota que es una zona de más lluvia. Sin ser
verde, que no lo es, si que los cultivos, se nota que reciben agua.
La bici, nuestra inseparable amiga, ha
estado en plena forma: hoy no hemos pinchado. Ni Joan ni jo somos expertos,
pero los caminos que hemos recorrido hasta el momento han sido muy duros, con
grietas y surcos, muchas piedras y pizarras. Y el peso que la rueda trasera
aguanta, es muy alto (posiblemente 13/14 kg mas nuestro propio peso).
Creo que la suma de las dos cosas ha sido
el motivo de los 8 pichazos que ya llevamos (cuatro cada uno, ni echo a drede).
La llegada a Zamora, preciosa. La muralla
prevalece en la visión que te encuentras, protegiendo lo que habia sido aquella
importante ciudad y además rodeada por el rio. Preciosa.
Eran las 14h y poco. Todo muy tranquilo.
Nos dirigimos al albergue que como no,
está en la parte alta. Una vez aposentados, vamos a comer un poco, luego a
descansar y eran las 19h cuando hemos ido a ver un poco el centro de la ciudad
y cenar.
Son las 22,20h. En el albergue ya han
cerrado las luces. Todos a dormir.
Las piernas están cansadas. Llevamos 10
etapas, más de 800 km. Nos quedan 6 etapas. Dos para llegar al Camino francés,
en Rabanal del Camino. Mañana, volveremos a levantarnos. Volveremos a coger la
bici y volveremos a recorrer más de 70 km, esta vez hasta Benavente.
Estamos ilusionados y muy cansados. Estamos
contentos.
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